LOS CINCO PRINCIPIOS REIKI, O
“MÉTODO SECRETO PARA ATRAER LA FELICIDAD” del Doctor Usui....(5/5-"La quinta entrega")
Estos cinco principios Reiki, de los que hablaremos largo y tendido tanto en este material didáctico como en el seminario, sobretodo en el de primer nivel, fueron originariamente establecidos por el Emperador Meiji de Japón (1868-1912) como guía para una vida realizada, y posteriormente fueron adaptados y recomendados por el Maestro Usui para incorporarlos a nuestras vidas como ayuda del proceso interior del reikista.
Esto último es lo que pretendo hacer aquí yo también, en estas páginas, pues aunque puedan parecer nimios o banales a simple vista, creo que, en realidad, los cinco principios Reiki presentan bajo una forma muy sencilla conceptos muy profundos, poderosos y transformadores; yo al menos así lo he percibido y vivido. Razón por la que me gustaría examinar, más detenidamente posiblemente que lo que es habitual en otros maestros, y explicarte, aunque de forma teórica, lo importantes y extraordinarios que son.
Aunque es en el seminario presencial que gusto de profundizar en la técnica, no puedo menos aquí que citarlos y enumerarlos, como Usui hizo, para que puedas empezar a trabajarlos ya. Pues estos cinco principios o preceptos son poderosos por sí mismos, si se recitan cada día -cosa que tú ya puedes empezar a hacer desde ahora, por tu cuenta- tal como Usui enseñaba, y aquí yo te trascribo a continuación, literalmente, para que te pongas ya manos a la obra:
Los cinco principios del Reiki o “método secreto para atraer la felicidad – maravillosa medicina para todas las enfermedades”, tal como los definía Usui en sus escritos. Son, traducidos del original:
SÓLO POR HOY
1. No te enojes
2. No te preocupes
3. Demuestra aprecio
4. Trabaja duro (sobre ti mismo)
5. Sé bondadoso con los demás
“En las mañanas y al anochecer, siéntate en la posición gassho* y pronuncia fuerte estas palabras y también en tu corazón. Para el mejoramiento del cuerpo y del alma. USUI REIKI RYOHO. Del fundador, Mikao Usui”.
*(La posición japonesa gassho: Es mejor sentarse sobre el suelo con las piernas cruzadas o sobre las piernas sin cruzarlas. Luego se apoyan juntas cóncavamente las manos sobre el chakra del corazón, como si rezaras).
Naturalmente, uno también puede sentarse sobre una silla, acostarse, o permanecer de pie. Como siempre, aquí lo que importa es la actitud y la intención; pero pueden mejorar su resultado si se trabajan en determinadas posiciones de manos, además. Esta nueva forma de trabajar los principios Reiki (con dos posiciones de manos y dos afirmaciones por cada principio), que enseño en el seminario presencial, es fruto de la experimentación innovadora, la combinación de técnicas y la experiencia de practicantes aventajados a lo largo de los años.
Las posiciones de manos, canalizando energía en ciertas partes del cuerpo hacia uno mismo o hacia otras personas, junto con la repetición de las afirmaciones relacionadas con el principio en cuestión, tanto en voz alta como con el corazón como bien enseña el doctor Usui, ayudan a conseguir reafirmar doblemente dichos principios, que se trabajan no sólo en el seminario sino, y principalmente, muy extensamente después en casa, como paso fundamental y previo al segundo nivel.
Pero, aquí y ahora, os invito con mis reflexiones ya, a cambiar vuestra percepción de la vida, viéndola a través de otro prisma, basado en el Reiki más tradicional, que nos enseña cuales son las cinco cosas que podemos hacer para llevar una vida exitosa y de grandeza en el Espíritu, explicadas a nivel más teórico y a modo de reflexión por mi parte.
REFLEXIONES Y BASES TEÓRICAS DE:
Vivir conforme a lo que dicen estos cinco simples principios Reiki es vivir según las exigencias del Espíritu, con éxito o grandeza y en armonía con Todo lo que Es. Aunque puede ser, soy consciente de ello, que tu concepto de grandeza, no corresponda y entre, además, en total contraposición con lo que has aprendido que el éxito es, a lo largo de tu vida. Eso fue lo que me pasó a mí. Es por ello que, aunque no lo parezcan, estos principios para mi son transgresores y, desde mi personal punto de vista además, muy importantes. Pues nuestra definición de grandeza , la que a partir de ahora tu vas a conocer y llevar a la práctica si así lo deseas, prescinde de la apariencia y otros indicadores externos convencionales, como por ejemplo la fama y el dinero, para medir el éxito en la vida… esas, recuérdalo, son las exigencias del ego, no las del Espíritu. Y el Espíritu, o Dios/a Fuerza, es Felicidad o Bienestar, sean las que sean las condiciones externas. Esas son sus exigencias, no lo olvides… no las del ego… y recuerda, simplemente recuerda. No hay nada más que hacer, o tener, sólo Ser lo que se Es.
1er. PRINCIPIO: Sólo por hoy, no te enojes
EN EL DÍA DE HOY ME SIENTO APACIBLE Y DE BUEN HUMOR
Si en este momento valoras tu nivel de éxito en base a la riqueza que has acumulado, prepárate para que tu estado de satisfacción y contento personal experimenten un cambio importante. En todas las generaciones ha habido personas sabias que han advertido a los demás de las diversas trampas de la felicidad. Tratar de comprar la felicidad es una de ellas. La trampa del dinero es la más importante, el materialismo desenfrenado en el que ha caído nuestra sociedad es causa del desequilibrio de recursos creado por la loca y rapaz necesidad de tener más, la búsqueda incesante de la seguridad material , o externa, para ser feliz.
Te aseguro que el dinero no da la felicidad, por el contrario sé muy bien que, lo que te hace, es llevarte a la inseguridad y/o codicia del ego, pues siempre surge la necesidad psicológica de tener más o la sensación de no tener bastante, tan característica del ego. El ego se identifica siempre con tener, pero su satisfacción al tener es relativamente poco profunda y dura poco.
Es posible experimentar cierta satisfacción durante el periodo inicial del logro pero, una vez disipado el primer fogonazo de satisfacción egoica, el ego comienza a desear un nuevo nivel de “éxito”. Por ello, necesita siempre más… enloquecido por la manía de poseer cosas… necesita más, de todo. Y así es como estamos inmersos en obtener bienes materiales que no necesitamos y que no nos aportan un beneficio real. Estamos obsesionados, en nuestra vida, por alcanzar el “éxito” o, al menos granjearnos la admiración y respeto ajeno, pues queremos ser reconocidos por nuestra “grandeza” como personas “especiales e importantes”.
Es una necesidad adictiva, que creemos nos lleva a la felicidad, pero no es auténtica y, por tanto, te lleva sólo a desear más y más sin parar y sin tener nunca suficiente, y, con ello, al descontento vital, fruto de la equivocada sensación de separación y/o carencia que eso produce, al pensar siempre en lo que crees necesitar y te falta. Parecemos albergar en nuestro interior un descontento interno, insaciable, una insatisfacción básica que nos atormenta y mortifica de continuo. Es la voz en la cabeza, esa que no cesa y nos distrae con sus múltiples estrategias para que no consigamos tener ni un minuto de inactividad ni nos quedemos a solas con nosotros mismos.
Es como si tuviésemos miedo de Nosotros Mismos. Y en realidad así es. Es el ego, que teme lo descubras, el que tiene miedo. Pues el ego no es tu Ser Real. Es la voz en la cabeza, pero esa voz no eres Tú. En realidad tú eres la conciencia que es consciente de esa voz. Conciencia es darse cuenta de que no somos nuestra mente. Pues del mismo modo que tenemos unas piernas que nos ayudan a caminar, tenemos una mente que nos ayuda a pensar. Pero no somos nuestros pensamientos ni nuestra mente solo, como no somos nuestras piernas tampoco. No somos esa voz en nuestra cabeza aunque, erróneamente, nos identifiquemos con ella.
Para tener una vida exitosa realmente, sólo hay que salir de la inconsciencia, en que nos hemos convertido. Dice Osho: “Pensar soy la mente, es inconsciencia. (…) Aparece la Ira: te conviertes en la Ira. Viene la avaricia y te olvidas: te conviertes en avaricia. Se presenta el odio y te olvidas: te conviertes en odio. Eso es inconsciencia.”. “Nunca luches con la avaricia, el ego, la ira. Los celos, el odio; no puedes matarlos, no puedes luchar con ellos. Lo único que puedes hacer es tomar conciencia de ellos, y en el momento que tomas conciencia, desaparecen”.
La ira no es más que un vómito mental, un sentimiento interno molesto que arrojamos a los demás. No tiene nada que ver con el otro, sino con nosotros mismos. Pues tiene su raíz en esa insatisfacción básica que todos experimentamos cuando nos alejamos de Nosotros Mismos, del Ser Real. De hecho, la declaración de Buda de que “la vida es sufrimiento” se refiere, estrictamente a este tipo de sufrimiento interno, a la falta de bienestar interior, que experimentamos por estar alejados de la Fuente. Esta condición de infelicidad básica es la que nos lleva, aunque erróneamente, a la búsqueda de satisfacción y seguridad externa. No nos
sentimos satisfechos con nuestra vida tal y como es, y vivimos en un estado permanente de carencia, y a la búsqueda desenfrenada y continua de la seguridad.
La búsqueda de la seguridad es una ilusión, como el mismo ego. Los que buscan la seguridad se pasan una vida entera persiguiéndola sin encontrarla. No deja de ser huidiza y efímera, pues la seguridad no procede exclusivamente del dinero, ni de nada que puedas conseguir externamente. Por el contrario el apego al mundo exterior nos produce el efecto contrario, más inseguridad, pues nada hay en el mundo de la forma que sea permanente: todo va y viene. Todo lo externo nos puede ser, algún día, arrebatado. Sólo lo Real permanece.
La necesidad de seguridad no es más que una falta de Consciencia, o falta de conocimiento del Ser Real. La fuente de riqueza, de abundancia, o de cualquier otra cosa en este mundo es el Espíritu, tu Ser Real; es la conciencia que sabe satisfacer todas las necesidades, las reales. Todo lo demás son símbolos, que vienen y van. Perseguir los símbolos es como conformarse con un plano en lugar del terreno verdadero. Sólo con la participación desapegada podemos tener contento y buen humor. Esto, el desapego, requiere un esfuerzo elevado de Consciencia pero es lo único que va a poder hacernos de verdad felices, no la acumulación de riquezas o de ningún tipo de “cosa” – sea objeto o sujeto- que se base en la forma, en la referencia Externa en lugar de la Interna, por muy preciada que pueda parecernos.
Es el chakra nº 1 el que tiene que ver con la seguridad y la satisfacción de las necesidades materiales, con la supervivencia y la existencia en el mundo físico, y la unión con la Tierra. Y es precisamente en él, cuando no está armonizado, donde se pueden ver los apegos que tengamos a los bienes materiales y los deseos de posesión. Esta falta de armonía en el cuerpo físico puede provocar inseguridad, y dado que su falta de seguridad afecta sobre todo a los bienes materiales y al temor de ser privado de ellos, puede volvernos agresivos e irritables. Razón por la que este primer principio, que trata sobre la Ira y el Enojo, tiene que ver mucho, y de hecho lo trabajamos en el seminario, con este primer chakra. Las dos posiciones de manos que enseño, y también las afirmaciones, tienen que ver con él.
La ira o el enojo bloquean el chakra nº1 o raíz y, con lo que hacemos en este chackra con las posiciones de manos, trabajamos el desapego y la energía apacible versus la agresividad, día a día, aportándole Consciencia.
Como este trabajo se nos antoja complejo, Usui nos sugiere con su método que no nos enfademos, que nos sintamos apacibles y de buen humor, “sólo por hoy”. Esta es una buena técnica para cambiar actitudes mentales cuando la “enormidad” del trabajo nos descorazona y la voluntad es débil y no nos lo permite. Es mucho más sencillo mantener un propósito durante un día: es más fácil recordarlo y parece también más fácil respetarlo si requiere un esfuerzo por un tiempo limitado. Por ello utilizamos el “Sólo por hoy” o “En el día de hoy” encabezando las afirmaciones.
La práctica cotidiana, y diaria, la repetición en voz alta y en el corazón de estos principios nos irá ayudando, poco a poco, cambiando así el pensamiento, utilizando la mente como sirviente y no como amo, a aplicar estas exhortaciones con naturalidad y a atraer hacia nosotros la
esencia de lo que estamos pensando y sintiendo ahora de nuevo. Pues lo que hoy piensas es tu futuro mañana.
Sin represión ni control de nuestra mente, y sobretodo sin expulsión insensata y destructiva de nuestra ira, ni para nosotros mismos ni para los demás. Poco a poco, día a día, y sólo por hoy, damos un paso al frente hacia nuestro bienestar. No hay Represión ni Expulsión. Es Transformación o Transmutación lo que hacemos, simplemente, y poco a poco, te vuelves Consciencia y la Ira desaparece.
2º PRINCIPIO: Sólo por hoy, no te preocupes
EN EL DÍA DE HOY ABANDONO MIS PREOCUPACIONES.
Pensemos en el término “preocuparse”, cuyo significado es “producir intranquilidad, temor, angustia o inquietud algo que ha ocurrido o va a ocurrir”. Consultando el diccionario vemos que deriva del latín praeoccupare, compuesto por prae y occupare, es decir “ocupar primero”; por tanto, preocuparse, como la palabra etimológicamente bien nos indica, pre-ocuparse quiere decir “ocuparse de algo antes de tiempo”.
Y efectivamente, ocuparse de algo antes de que sea el momento para hacerlo, suele producir inquietud o angustia, y ocurre que a veces nos gana la angustia, experimentando el sufrimiento, antes incluso de que aparezcan los problemas reales en nuestra vida. Con lo que, además de perjudicial, dicho sufrimiento es verdaderamente inútil. Inútil porque podrían darse circunstancias diferentes de las que prevemos en nuestra mente o que éstas, de darse, se resuelvan sin necesidad de nuestra intervención y porque además la intranquilidad que produce la preocupación hace que se pierda la serenidad necesaria si la situación llegase a requerir realmente de nuestra intervención.
Y si los grandes problemas de tu vida ya están ahí, reconsidera la manera de hacerles frente pues la preocupación, o la angustia, sólo te lleva al sufrimiento. Y el sufrimiento es darle más valor al ego que al Espíritu y, además, perjudicial para nuestra vida. Perjudicial porque esta situación de temor y angustia podría hacer incluso que la situación se volviera en contra nuestra y, en el momento de actuar podríamos, por agotamiento o nerviosismo, no ser capaces de ocuparnos de nuestra vida y de los problemas que nos acucian en esos momentos, de la manera más correcta.
Dice el Tao que: “el sabio no ambiciona lo que es difícil”, “no se aferra a nada y así nada pierde”. ”No acumula cosas preciosas; aprende a no obstinarse en sus ideas. Ayuda a las diez mil cosas a encontrar su propia naturaleza, pero no se aventura a manejarlas a su antojo.”. Sé consciente en tu interior de hasta qué punto muchas de tus dificultades o problemas son fácilmente evitables si te niegas a aferrarte a las ideas que en gran medida los causa. La angustia y el sufrimiento ocurren porque “ambicionas lograr lo difícil”, en palabras del Tao, y te obstinas en tus ideas. Bien lo dice el dicho del sabio:”si tus males tienen remedio para qué preocuparse y, si no lo tienen para qué preocuparse, igualmente”. En resumen podríamos decir que si existe una solución, se presentará antes o después; si no la hay, no podemos hacer nada, así que ¿por qué preocuparnos por algo que va más allá de nuestras posibilidades?
La Inteligencia del Espíritu-Fuerza o Energía de la Diosa, que es la que realmente Sabe, funciona con una facilidad libre de esfuerzos, con una despreocupación tranquila. Sólo hay que observar… La hierba no se esfuerza por crecer; simplemente, crece. Las flores no se esfuerzan por abrirse; simplemente, se abren… y así es como funciona, la Inteligencia de la Naturaleza funciona sin esfuerzos, sin roces, espontáneamente. Es intuitiva, holística, nutriente. Sigue su ejemplo, aconseja este primer principio Reiki: no te preocupes; simplemente – ¡y si llega el caso!- ocúpate.
También la filosofía védica, al igual que otros muchos sistemas orientales, tal como antes me refería al Tao o al propio Reiki, hace igualmente referencia a esto y lo llama el principio de la economía del esfuerzo, o “hacer menos para conseguir más”. Gastamos un esfuerzo mínimo cuando nuestros actos están motivados por el amor, no por el miedo -¡contrario al amor y sinónimo del ego!- que produce la preocupación. Por el contrario, cuando buscamos el dominio y controlar las situaciones o a las personas, cuando la referencia interna es el ego o el miedo y buscamos reconocimiento, dinero o poder, la energía se derrocha en ello.
Cuando se libera esa energía, es posible volver a canalizarla sólo cuando su punto de referencia interno vuelve a ser el Espíritu (no el ego) y el momento presente. Dale la bienvenida al momento presente sin importar el disfraz que adopte, y pronto verás los resultados. Preocuparse es poner la referencia en “el mundo de las diez mil formas” -¡siempre cambiantes!- y en el ego, en lo Externo, en lugar de en el Espíritu Permanente, en lo Interno. Preocuparse es no aceptar el momento presente tal como es, quedándonos bajo el dominio de nuestra mente y del ego, en las ideas preconcebidas del pasado o aventurándonos al futuro con nuestras conjeturas. Y alguien dijo una vez:” el pasado es historia; el futuro es un misterio, y este momento es un don. Por eso llamamos a este momento el presente, un regalo.”.
Y el presente, este momento que estamos viviendo ahora mismo, es precisamente eso, un regalo por ser la culminación de todos los momentos que hemos vivido en el pasado, según la ley de causa y efecto, o Karma. Detrás de todo suceso o acontecimiento presente existe un regalo, una oportunidad siempre, un Dharma o propósito, un significado oculto que está favoreciendo nuestra propia evolución seguro, pues nos permite tomar este momento –¡el único que existe, para el Ser!- y transformarlo, si así bien lo decidimos –¡pues todo depende de tu decisión!-, en un beneficio mayor siempre. Y esto sólo puede hacerse, justo en el momento presente, ni antes ni después, por eso es realmente un regalo. Es importante comprenderlo.
Pues aceptando las cosas tal y como son - y no tal como tú o tu ego, mejor dicho, se aferra a que sean, según sus propias ideas-, es la única manera de poder cambiar, en un futuro, las situaciones que hoy no te gustan. Este es el primer paso. Recuerda el dicho: “Lo que piensas hoy, es tu futuro mañana. Lo que hoy tienes, es lo que pensaste ayer”. Por ello, es aquello de: “tras todo problema se esconde una oportunidad camuflada”, descúbrela ahora, en el día de hoy, te dice el Reiki, y no permitas que la preocupación te embargue, simplemente ocúpate en descubrirla y solucionar así el problema, cuando llegue… -¡si llega, claro!-… en el momento presente y nunca antes de tiempo. Esto te aconseja el Reiki. Te ahorrarás así mucha energía y sufrimiento innecesario. Nuevamente se trata simplemente de tomar Consciencia. Ni reprimir ni tan siquiera expulsar, sólo transformar o transmutar la energía de la preocupación.
La preocupación bloquea el chackra nº2 o sexual, que nos proporciona el gozo de vivir, día a día, con plenitud y alegría, sin preocupaciones, sintiendo la Unión con la Naturaleza y los procesos naturales corporales en toda su plenitud. Los instintos naturales –los sexuales, por ejemplo- y los procesos corporales –menstruación, embarazo, lactancia- trascienden el control mental de nuestro ego. Así, no importa cuanto intentemos refrenar y dominar nuestros instintos naturales, siempre acaban reapareciendo y más si no les damos un curso normal. Es esta imposibilidad última de controlar el cuerpo, por parte del ego, lo que hace que éste último incremente su hostilidad, muchas veces, hacia el primero, llegando incluso a rebelarse el ego ferozmente (pues, de la misma manera que al ego le gusta dominar, también detesta ser dominado) rechazando así, muchas veces, al cuerpo y atentando gravemente contra él.
A través de la unión sexual y del chakra nº2, cuando la energía fluye de forma natural, se experimenta una sensación de plenitud y de unión con la Vida. Vislumbramos la Unidad, que nos libera de toda preocupación y nos aporta la certeza de que todo es tal como debe ser. Pero cuando el chakra nº2 no funciona, o la preocupación lo bloquea, se tiende a negar o reprimir esa certeza que da el gozo de vivir llegando, incluso, a expresar las energías sexuales y los instintos por otras vías, en manifestaciones con carácter enfermizo, que buscan sólo la pura satisfacción egoica.
La energía optimista del chakra nº2, la despreocupación por vivir y el gozo, se potencia con posiciones de mano que implican a los dos chakras superiores, el 6º y 7º, a fin de utilizar nuestras facultades más elevadas y nuestra espiritualidad suprema, o Consciencia, para no quedarnos anclados en la visión más terrenal de la preocupación, o del ego. De este modo somos capaces de abandonar nuestros sufrimientos terrenales y alcanzar la alegría y pureza absoluta del Ser.
Otras prácticas te aconsejo, como la risa… o la sonrisa. Simplemente sonríe, sonríe cinco veces al día sin motivo especial, por ejemplo. Tu sonrisa puede ser un acto deliberado e intencionado, no un simple acto reflejo. Cuando lo es, se convierte en un acto de creación y, por tanto, en una herramienta poderosa. Y canta, sí canta una vez al día como mínimo. Ello desbloquea también el chakra nº2 y cambia, verdaderamente, las vibraciones de tu cuerpo haciéndote sentir mejor, sean cuales sean las circunstancias externas de tu vida… Hazlo a diario. Prométetelo, cambiará todo. Puede que te parezca una tontería, eso de sonreír o cantar como te digo, para algunas personas hasta puede ser un trabajo duro, pero te aseguro que son otros recursos poderosos como el Reiki, actos de creación deliberados, que te alejarán de la preocupación aportando a tu vida alegría y gozo de vivir. Pruébalos, que además los tienes al alcance de la mano… ¡ Y no cuestan nada, son gratis!.
3º PRINCIPIO: Sólo por hoy, demuestra aprecio.
EN EL DÍA DE HOY DEMUESTRO APRECIO Y AGRADECIMIENTO.
Nos invita a no pasar por alto lo que la vida nos ha dado de positivo y a reconocer su valor. Usui nos aconseja recibir hoy con agradecimiento todos los dones que nos ofrece la vida. Recibe los dones de la Naturaleza: la luz del sol y el canto de los pájaros, o las lluvias de primavera, o la primera nieve del invierno. Y también aquellos dones que recibimos de las
personas que nos quieren, los dones más preciosos de la vida: los dones del interés, del afecto, del aprecio y del amor. No los pasemos por alto, son verdaderamente importantes, pues es la manera de no interrumpir el flujo de la energía en nuestras vidas.
Toda relación se basa en un dar y recibir. El dar engendra el recibir, y el recibir engendra el dar. En realidad, recibir es lo mismo que dar, son los dos aspectos del fluir y circular de la energía. Para que esta energía siga llegándonos, tenemos que mantener su circulación en todo momento. Así la reciprocidad se hace fundamental para llevar una verdadera vida de éxito y grandeza. Para ello, aconseja Usui, empecemos por demostrar aprecio y agradecimiento poniendo así en marcha el proceso de circulación de la Abundancia en nuestras vidas: abundancia de Alegría, de Amor, de Paz, de Armonía y de Sabiduría. Nuestra Naturaleza verdadera es de Abundancia, poseemos la abundancia por naturaleza, por mucho o poco dinero que tengas, pues la fuente de toda riqueza es el Ser, la Consciencia que sabe satisfacer todas las necesidades, no lo olvides. Si primero buscas la Consciencia, todo lo demás llegará espontáneamente, y según lo necesites, a tu vida. Ni te enojes, ni te preocupes, sólo demuestra agradecimiento por todo. Si te quejas, o te preocupas, continuamente lo que haces es mantener tu atención en el objeto de tus quejas o tu preocupación, en la escasez, en lugar de en la abundancia, y atraes hacia ti eso. Recuerda esto: “Lo que rechazas o resistes, persiste”, y el Universo, que siempre provee, te dará lo que pides, o sea, más de lo mismo. Cambia tu Percepción, -¡con tu decisión!-… y cambiará tu vida.
La gratitud es la manera más simple y eficaz de desarrollar la conciencia de la abundancia. Es otra manera de Dar. Expresando nuestro agradecimiento damos valor a circunstancias y personas. Les agradecemos su cariño, su dedicación, su paciencia, sus consejos…, en fin, todo lo bueno que nos han aportado. Todas las experiencias que hemos vivido juntos, también. Agradecemos todo, lo bueno por supuesto, y las experiencias “negativas” también, pues de ellas hemos aprendido y, no lo olvides, te han traído dónde ahora estás. Todas fueron lecciones importantes en tu vida y, aunque en algunas todavía no sepas ver la razón, agradece al menos que hayan concluido. Y si aún no han concluido las experiencias “malas”, agradece igualmente las experiencias del presente, porque ellas serán, sin duda alguna, tus maestras en el futuro. Así, con tu actitud de aprecio y agradecimiento total, agradeciendo lo bueno y lo malo en tu vida, siembras la semilla del amor y de la abundancia, reconociendo y adquiriendo Consciencia de Aquello que Realmente Eres.
E igual que agradecemos todo lo que recibimos, yo te aconsejo que vayas más allá aún practicando la entrega en tu vida: dando a los demás aquello que tú quieras recibir y no dándoles, o no haciéndoles, a ellos aquello que no quieres que te hagan a ti. Aprende a otorgar a los demás calladamente tu bendición, ayuda a los demás también a recibir lo que desean; el pensamiento de bendición o una simple oración, pone en marcha el proceso. Pues el pensamiento tiene el poder de transformar y, en realidad, las formas de entrega más poderosas, recuérdalo, no son materiales.
Dice el Tao: “El maestro puede dar sin parar porque su riqueza no tiene fin”. Llena los vacíos, manteniendo el equilibrio cíclico del mundo, pon tu “riqueza” donde observes que hay escasez. Si no puedes, por ejemplo, permitirte dar dinero a los menos afortunados, bendícelos en silencio. Ofrece una oración cuando oigas la sirena de una ambulancia o la de un coche de
policía, es otro ejemplo de lo que puedes dar. Busca ocasiones de llenar el vacío en la vida de otras personas. Te aconsejo que practiques actos espontáneos de bondad, poniendo en marcha la entrega con pequeños -¡o grandes!- actos de desinterés, como por ejemplo: cede a otro conductor tu lugar en el aparcamiento, haz una tarta y déjala en la puerta del piso de alguien, o una flor. Pon dinero en la cartera de un amigo en apuros, o un mensaje de buena voluntad anónimo en el contestador. En fin, pon en marcha la circulación de tu “riqueza” en la vida, a base de entregar y recibir -¡o viceversa!- mediante tus palabras de agradecimiento, tus pensamientos de bendición o tus actos de bondad. Todo ello vale, para mantener el flujo constante de la Energía en tu Vida.
Esto es:”Dar para recibir, Recibir para dar. Empieza por Agradecer.”, de esto trata este tercer principio. Sólo por hoy, como enseña Mikao Usui, piensa en las cosas buenas que tienes, reconoce su valor, empieza a dar… y… el Universo, o Dios/a-Fuerza, te responderá con éxito y grandeza, con el fluir de la Energía, y una vida de realización constante. Pues recuerda que el gozo de vivir, que es la única felicidad auténtica, no puede llegarte a través de obtener ninguna forma, posesión, logro, persona o suceso. Pues emana de la dimensión sin forma que hay dentro de ti, del flujo constante, de la Conciencia misma, de lo que Tú Realmente Eres. Tienes ya todo lo que piensas que el mundo te está negando, pero si no lo dejas fluir hacia fuera, ni siquiera sabrás que lo tienes, ya lo expresó Jesús: “Dad y se os dará”
Este tercer principio lo trabajaremos, con nuestras posiciones de mano y afirmaciones que explicamos en el seminario presencial, en el chakra nº 6, llamado Tercer Ojo o Frontal, que corresponde a la Gratitud, pues en él reside la Comprensión, la Percepción del Conocimiento del Espíritu y la Intuición superiores, que nos lleva a un estado de Conciencia avanzado, que da paso a la Espiritualidad, y a nuevas formas de Percibir la Vida. Cuando el sexto chakra funciona mal se concede una importancia excesiva a la mente, sólo a los procesos mentales y al ego, que domina todos los aspectos de la vida haciéndonos asumir actitudes arrogantes y pedantes, alejadas de la gratitud y propias de la rigidez mental, que nos impide alcanzar ese estado de Conciencia que nos lleva a dar y recibir, o recibir y dar la Abundancia que Somos, haciendo fluir así la Energía, que pudiera estar bloqueada en nuestro cuerpo, o en el de otros.
Así, con este principio recuerdas, que la fuente de toda abundancia no está fuera de ti. No obstante, empiezas por reconocer y apreciar la abundancia de fuera, esa es la clave. Es la ley de que el flujo hacia fuera determina el flujo hacia dentro. Reconocer esa abundancia que te rodea despierta la abundancia latente en tu interior. Deja entonces que fluya hacia fuera, y… tras colocarte las manos,… ¡empieza con una simple sonrisa a un extraño! Muestra así tu aprecio y agradecimiento a la Vida. Reconocer lo bueno que hay en tu vida es la base.
4º PRINCIPIO: Sólo por hoy, trabaja duro (sobre ti mismo).
EN EL DÍA DE HOY, TRABAJO HONESTAMENTE Y DURO CONMIGO.
Este principio para mí es uno de los fundamentales, aunque me ha costado llegar a él y entenderlo bien. Pensaba que controlarme era trabajar duro conmigo misma y, sí, lógicamente lo era, y muy duro, pero… ¡no era honesta conmigo! Me faltaba la segunda parte, la que a la mayor parte de nosotros le sigue faltando.
Estamos acostumbrados a trabajar duro, en eso no hay problema. Nos dicen que la mente es el problema y rápidamente sabemos que así es. Pues en los pocos momentos que hemos conseguido aquietarla vislumbramos una nueva comprensión, una comprensión que es existencial, no mental, y en la cual gustamos de permanecer. Pero nos engañamos en la manera, el ego es muy sutil y nos hace creer que el control es la forma de aquietar la mente y, al principio, cuando descubrimos nuestros múltiples embrollos mentales pensamos todos que así es, pero aunque pueda parecerlo, no lo es realmente. El ego nos lleva a engaño. Pues el control forma parte de la propia mente, del ego y del problema, y no puede llevarnos jamás a la solución, aunque así lo creamos, pues él mismo es el problema, y sigue siendo mente. Y la solución está más allá de la mente, de la mente consciente y de la inconsciente también (aquella que mediante el control recoge todo lo reprimido, lo que empujas a la oscuridad para no ver, pero que desde allí continúa igualmente afectando a tu conducta y a tu vida aún sin tu darte ni cuenta). La solución está en otra parte, eso es lo que te dice este principio, la solución está en el Espacio Sagrado del Corazón.
Para aquietar la mente hay que ir hacia dentro, más allá de la mente, a otro lugar, más hondo en ti, al centro de tu Ser, al Corazón, donde se haya el Ser Que tu Eres… y aquí es cuando entra la segunda parte y consigues así ser honesto/a Contigo Mismo/a … cuando descubres al Ser Real y te haces uno con él; esto es lo que se llama ir hacia dentro, pero no es un ir en absoluto, es simplemente no salir, no salirse de uno mismo y ser honesto con lo que Uno Es. Pues, aunque tenemos mente, no somos nuestra mente. No tenemos ni idea de quien somos realmente. Somos Seres Divinos, Espirituales, en una experiencia Física, terrena, y nuestra misión aquí consiste en reconocer, y ser, la expresión más grandiosa de Quienes Somos. Esto es ser honestos con nosotros mismos, trabajar duro en nosotros, hasta encontrarnos, para poder ser plenamente felices y así, en la Conciencia de lo que Somos, lejos de todo sufrimiento o separación, hacer avanzar la Evolución del Alma. Tanto del Alma individual como del Alma Única que Existe.
Trabajar duro es, desde esta nueva visión, permitir tu conexión con tu Ser Real, ser capaz de ser lo que eres, pura felicidad, y así ser honesto y fiel a Ti Mismo, teniendo la disciplina de practicar los principios y así actuar o participar en la Vida con gozo siempre, aunque los demás no lo entiendan o aprueben. Por eso es duro, pues para conseguirlo se requiere salirse de la mente ordinaria, llegar a la no-mente o supramente (a aquel lugar que a mí me gusta llamar "El Espacio Sagrado del Corazón"), lejos del dominio de toda creencia mental o memoria anterior -individual o colectiva, da igual!- poniendo fin a los juicios de valor sabiendo que todo, absolutamente todo, “bueno” o “malo es igual, es una oportunidad sin igual para que declares, expreses y vivas interiormente la Divinidad que tienes dentro.
Y esto en Reiki lo trabajamos a través del chakra nº3 o plexo solar donde reside la personalidad, el ego, y las cualidades que tienen que ver con la mente racional y ordinaria del ser humano. Aunque mental, este chackra está directamente relacionado con la vida emocional también; pues con este chakra prestamos atención a las energías y a las vibraciones de la vida que nos rodean, las estamos recibiendo y enviando a cada instante, las captamos.
Son los sentimientos de las entrañas, aquellos que nos alertan de lo que no resuena en Nosotros. Antes de venir aquí acordamos con nuestro Ser Real que existiría una comunicación con él, y que esta sería en forma de un sentir de los que no se pueden pasar por alto, en forma
de emoción. Hay dos tipos de emoción: las que nos hacen sentir bien y las que nos hacen sentir mal. Y se acordó que las que nos hacen sentirnos bien se presentarían cuando pensásemos, hablásemos o hiciésemos aquello que estuviera en armonía con el Ser. Y las otras, al contrario… algo así como una comunicación en código binario, rudimentaria pero clara. Cuando el chakra nº 3 se armoniza, y se trabaja con el 4º y el 6º, permite esa conexión más allá de la mente, a través de la emoción, y ya no es necesario que se controlen los pensamientos, sólo prestar atención a cómo nos sentimos.
Pero cuando el chakra nº3 se bloquea, es pura mente ordinaria que no presta atención al sentir y sólo ambiciona y se apega al mundo. Lo trabajamos con el chakra nº4 a fin de capacitarlo y abrir vía de conexión con el corazón y la aceptación (el Amor Incondicional, hacia todos e incluso, y sobretodo, hacia nosotros mismo y nuestra propia personalidad o ego, que este chakra representa) y también con la intuición (o Inspiración) del 6º chakra, a fin que la comunicación con el Ser fluya, quedando el ego en un respetuoso -¡y amoroso!- segundo plano, y la Consciencia abriendo camino hacia el primero.
Hemos de trabajar duro, a diario, a fin de favorecer la comunicación con el Espíritu, nuestro Ser (o Yo superior) y así pensar, sentir o hacer en sintonía, fieles siempre a Nosotros Mismos. El Reiki es una vía, de esto trata este 4º principio, y el siguiente.
5º PRINCIPIO: Sólo por hoy, sé bondadoso con los demás.
EN EL DÍA DE HOY, SOY BONDADOSO Y AMABLE CON EL PRÓJIMO Y RESPETO A TODO SER VIVIENTE.
La Biblia dice: “Honrarás a tu padre y a tu madre” y “no matarás”, entre otras. El evangelio dice: “Ama a tu prójimo” y la sabiduría popular: “Haz bien y no mires a quién”. Son exhortaciones muy familiares para nuestra cultura… aunque en la práctica no siempre se respeten, ¿verdad?.
Todas las formas de vida merecen nuestro respeto, de esto trata el 5º principio que, a su vez, trabaja sobre el 5º chakra, el de la comunicación. El chakra nº5 es el primero de los tres superiores, se ubica en la parte más estrecha de nuestro cuerpo, en la garganta, y es por medio de éste que podemos iniciar el camino espiritual, es el que abre las puertas de la gran liberación. También conectado con las emociones, la expresión “nudo en la garganta” claramente nos lo demuestra, ¿verdad? Es el que trae la escucha interna, la comunicación con el Sí Mismo o Yo superior, y, ya te digo de antemano que, lo vamos a potenciar y capacitar, precisamente por ello, más que a los otros; con cuatro posiciones de manos en lugar de dos, dos más que los anteriores. Dichas posiciones involucran a los cuatro inferiores, potenciando así la comunicación y expresión armónica a todos los niveles.
Siempre he creído que “Amar es comunicar” por ello me parece fascinante este principio, más si cabe que los anteriores. Es el alfa y el omega, creo, de los principios Reiki. Cuando el chakra nº5 funciona a pleno rendimiento, somos capaces de expresar con extremada claridad y con un lenguaje rico nuestros propios sentimientos e ideas, nuestra Verdad Personal, sin temor ni
tapujos, fieles a Nosotros Mismos. Sin represión ni brutal expulsión, sino en armónica expresión… surgen así las palabras, en el lugar justo, en el tiempo correcto y a la persona, o personas, adecuadas. Y además, no sólo hablamos correctamente o impecablemente; también escuchamos a los demás, con comprensión, pues es parte del proceso y de este principio en concreto. Esto, escuchar, es un gran arte. ¿Sabes que puedes hacer felices a las personas con sólo escucharlas? ¿Sabes que te puedes hacer feliz a ti mismo a base de escuchar a los demás y a ti mismo? Escuchar es una de las maneras más ricas de mostrar, y hacer, el amor, es gratificante, llena de gozo.
Desde el 5ª chakra, con comprensión y amor nos expresamos, cuando lo trabajamos (sólo por hoy trabajo duro y honesto conmigo mismo), utilizando la garganta u otros métodos -como las palabras en sí y la escucha activa. También el Silencio, que es la comunicación que va más allá de las palabras- relacionados con este 5º chakra, para expresarnos apaciblemente (Sólo por hoy me siento apacible y de buen humor) y en el tono adecuado, en armonía con el Universo, entonando la melodiosa canción de la Vida, mostrando así nuestro amor y respeto (sólo por hoy soy bondadoso y amable, y muestro respeto al prójimo) a todas las personas a las que con nuestra vida afectamos, y mostrando también nuestra gratitud (Sólo por hoy demuestro aprecio y agradecimiento) ante la propia vida, aceptándola tal y como es, con todos sus disfraces y sin expectativas (sólo por hoy abandono todas mis preocupaciones) sabiendo que la vida siempre, aunque no lo parezca, está conspirando en todo momento a nuestro favor, pues todos los acontecimientos siguen el Plan Perfecto y no son más que Oportunidades, regalos en el presente, de crecimiento y de conexión con Quien Realmente Somos. Y así Vivimos Felices.
Éste no es ningún ideal soñado, absolutamente inalcanzable. Todo lo contrario, nos dice el Reiki. La felicidad no sólo es posible, es necesaria y vital. Y de ahí, los cinco principios como método para alcanzarla. El Reiki es una Vía, una más, aunque muy efectiva y hermosa según mi parecer, para llegar a la felicidad. Es una cosa que podemos hacer todos, vayas o no por esta vía, muchas personas lo han demostrado. Pues la lista de personas que han conseguido, pese a haber sufrido penalidades enormes en sus vidas y grandes dificultades, ser felices pese a todo y mostrarlo, abrazando una actitud pacífica, libre de condenas y ataques pese a todo, es enorme y muy larga para reproducir aquí. Yo misma, sin ir más lejos, y gracias a las experiencias vividas, sufrí tanto que llegó un momento que literalmente mi cuerpo de dolor explotó, dándome cuenta del velo de la ilusión, de la “matrix” o “maya”, que había estado impidiéndome percibir la realidad tal como es, con mis múltiples creaciones, dando lugar así y de inmediato -¡aunque después de mucho trabajar, y perseverar antes, con los principios Reiki pese a todo!-, a una paz, y felicidad, fuera de toda comprensión, donde los principios de la Vida se me manifestaron en toda su Expresión. Como espero suceda ahora también contigo.
Este es mi mayor anhelo, para ti que lees esto, si tú así lo deseas: ¡Qué te afanes, cueste lo que cueste, en ser feliz!. Pues ser feliz es el atajo más rápido, para llegar a donde quieres llegar. Si primero buscas la Felicidad, que da la Conciencia, todo lo demás te llegará espontáneamente, y según lo necesites, a tu vida. Sólo cuando somos felices las cosas buenas “ocurren” y “vienen a nosotros” milagrosamente. El Reiki puede ser la vía para ello. El secreto está en saber que tenemos el poder de cambiar nuestras vidas, sin depender de nada ni de nadie fuera de Nosotros Mismos. El Poder está en Ti (pero en el Espíritu y no en el Ego), este es el secreto para atraer la felicidad, y el método de Usui: ¡Los 5 Principios Reiki!. Practícalos, a diario.
Vamos ahora a explicar cómo practicar estos principios:
1. Siéntate o acuéstate cómodamente y cierra los ojos. Permite que cualquier pensamiento que venga a tu mente pase suavemente. No intentes parar tus pensamientos. En lugar de eso observa lo que pase, sólo deja que suceda naturalmente lo que haya de venir.
2. Ahora recita en voz alta o piensa en el primer principio: En el día de hoy me siento apacible y de buen humor (y, de la misma manera, haz después con los cuatro restantes. Utiliza siempre, mejor, la afirmación en positivo como en el ejemplo). Piénsalo sin ningún esfuerzo, como lo harías con cualquier otro pensamiento, sin concentrarte y sin tratar de entender su significado.
3. Al mismo tiempo que recitas o piensas en el primer principio, pon tu atención en el área del corazón.
4. Después de recitar o pensar cada principio, deja un espacio, haz una pausa. Espera unos momentos, repite el principio, lleva tu atención al corazón y de nuevo deja un espacio. No pienses el principio de forma ininterrumpida como un mantra, deja siempre un espacio de unos segundos entre cada repetición para entrar en el Espacio Sagrado del Corazón. Éste se irá, poco a poco, manifestando. Aunque en un principio puede que lleguen pensamientos a tu mente en ese lapso, en lugar de experimentar la paz y felicidad que suele acontecer con la práctica. Si sucede que hay pensamientos, no te preocupes, cuando te des cuenta vuelve a recitar o pensar el principio de nuevo. Es el proceso normal y natural. Sólo recuerda: cuando notes que no estás pensando o recitando el principio, elige pensarlo de nuevo.
5. Continúa de esta forma por un espacio de unos 3 minutos mínimo por cada principio, en total un mínimo de 15 minutos cada vez. Haz esto unas tres veces al día, o bien una vez al día durante 9 minutos por cada principio, lo que a ti mejor te vaya. Aunque, recuerda, no hay nada rígido en Reiki, nada obligatorio sólo aconsejable. Ni la práctica requiere de ningún tipo de esfuerzo físico o mental; no hay rígido control nunca. La práctica sólo requiere de práctica y compromiso de practicar lo más que puedas. Y lo que sea que sientas o pienses durante el proceso, sólo recuerda esto: está en ti. Está en ti, y en nadie más, aunque parezca involucrar a otras personas. Cuanto más rápido abraces las partes de ti mismo que rechazas, más rápido tu inconformidad o malestar será reemplazada por la libertad del amor incondicional. La práctica del proceso te muestra lo que hay en ti mismo. Pase lo que pase en ella (pensamientos, emociones, malestar, incomodidad, miedos…) sigue practicando, y lo que sea que esté pasando en ti se irá. Sólo sale a la superficie para que lo integres, tú sigue practicando. Cuando se haya ido, te sentirás mucho mejor. En la medida que continúes con la práctica, los cambios se manifestarás por sí mismos en cada área de tu vida.
6. Si conoces las posiciones de mano que se enseñan en el primer nivel (Apéndice E de los apuntes) para estos cinco principios, canalizando energía Reiki en las específicas y citadas partes del cuerpo, y has recibido las respectivas iniciaciones de primer nivel, conseguirás con ello una ayuda extra para reafirmar los principios. Pero aunque esto no fuera así, no dejes de practicar igualmente lo que aquí te enseño, pues estos principios son poderosos por sí mismos si los trabajas a diario tal como te explico.
A través de la práctica de estos principios, la Conciencia que el Amor Es empieza a expandirse y nuestros apegos comienzan a disminuir naturalmente cuando conocemos al Ser Real. A medida que trabajamos con Reiki nuestro propio cuerpo, nuestro sistema nervioso eleva su frecuencia y es el propio cuerpo el que comienza a rechazar sustancias o comportamientos perjudiciales, porque para sostener la verdad personal de quien eres, para moverse dentro del amor-conciencia, debe sanarse y actualizarse. Existe en todos nosotros la fuerza vital, expresión de la energía creativa de la Diosa -como a mi me gusta llamarla-, oculta en nuestros cuerpos. Hemos de abrir ese espacio, de una manera u otra, dentro de nuestro cuerpo físico, para poder crear sanación, transformación y realización, y así –¡con Amor y Conciencia!- restablecer el equilibrio en nosotros primero, y luego en el mundo. Los Cinco Principios Reiki es una de esas maneras.
A medida que la energía Reiki fluye por nuestro cuerpo, la vida comienza a mostrarnos su auténtica naturaleza, no podemos ignorar más la verdad sobre nosotros mismos: tenemos que empezar a soltar y encontrar plenitud dentro, en Nuestra Propia Fuente: Lo que Uno Es. Pues la verdad personal, cuando realmente la conoces, pugna por salir y uno aspira a vivir entonces de manera más auténtica, en concordancia con ella; “pues la verdad eleva el espíritu, la verdad libera la mente, la verdad abre el corazón y la verdad enciende la pasión y libera el amor del alma.” (Según bien explica NEALE DONALD WALSCH en su libro Dios es Felicidad, el cual te recomiendo encarecidamente pues aclara conceptos de lo que últimamente está muy de moda: el Secreto y la Ley de la Atracción, métodos para alcanzar la felicidad también).
Cuando los principios empiezan a trabajar, empezamos a percibir las cosas de otra manera, de esa forma auténtica, bajo la Luz del Amor que el Reiki es, ya no somos seres desconectados caminando dormidos por la vida. La “matrix” de la mente y el ego, aunque dura, empieza a resquebrajarse y aunque durante un tiempo podamos aún reprimirnos nosotros mismos y aferrarnos a nuestros miedos, llega un momento que, con la ayuda de la práctica, alcanzamos un punto en el que no podemos más. El sufrimiento se hace incompatible con la Consciencia. Luego algo sucede siempre. Nos enfermamos o perdemos a un ser querido, ocurre algo (una bancarrota, un divorcio, una crisis personal o social… en fin, algo relacionado con una fuerte pérdida) para que la presión pueda ser liberada, y dejamos de actuar como lo hacíamos antes y empezamos a hacer nuevas elecciones.
Antes siquiera nos habíamos dado cuenta de lo que hacíamos, estábamos tan acostumbrados a las elecciones que nos hacían sufrir que ni siquiera nos habíamos dado cuenta de que estábamos haciendo una elección. Ahora vas a poder elegir: reaccionar y sufrir o actuar y ser feliz, tú decides. Todo depende de tu decisión, es importante que lo sepas. Actuar comienza con la práctica, dándote la oportunidad de hacer este trabajo, no lo deseches, te aconsejo lo practiques, como Usui en su día ya hizo, para vivir en el Aquí y Ahora, abrazando la abundancia, la belleza y la magia de la Vida, con gozo, percibiendo la perfección de tu creación. Pues cuando hallas la perfección, todo cambia. Atrayendo a tu vida entonces la Plena Felicidad al fin.