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HOY vamos a aprender a multiplicar, puesto que somos much@s, DISTINT@S y DIVERS@S. Mas, a pesar de (o, más precisamente, gracias a...) no debemos olvidarnos de lo siguiente:
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TODAS LAS COSAS... ¡Son Una Cosa!!!...
Todas las cosas son Una Cosa. Sólo hay Una Cosa, y Todas las Cosas forman parte de la Única Cosa Que Es. Por tanto, lo que haces por otro, lo haces por ti; y lo que dejas de hacer por otro, lo dejas de hacer por ti.
La inversa también es cierta. Lo que haces por ti mismo, lo haces por otro; y lo que dejas de hacer por ti, dejas de hacerlo por otro. (Por eso se ha dicho tantas veces eso de que "si no sabes amarte a ti mismo, no sabrás amar otro".)
NEALE DONALD WALSCH
Es fundamental, Corazones, que no olvidemos esto nunca. Y en este orden, eh. Y es que... TÚ NO ERES EL PROTAGONISTA DE TU VIDA, por mucho que por ahí digan... ¡O sí, porque tod@s som@s Una Cosa!!!.
El protagonista de tu vida es "TODO EL MUNDO", o sea... ¡¡¡TÚ!!!!. Pero visto desde esta manera, siguiendo el orden correcto de las cosas. Pues Tod@s Somos Un@. Por tanto trata a los demás como quisieran ser tratados, como si fueses tú. Pues lo que haces a los demás se te hace a ti... por el sencillo motivo de que no hay "los demás". No hay nadie más que TÚ, pero en formas múltiples, distint@s y divers@s. No lo olvides. Así que...
¡¡¡TRÁTATE/ME BIEN!!!. Es hora ya de darse cuenta y actuar.
Todas las cosas son Una Cosa. Sólo hay Una Cosa, y Todas las Cosas forman parte de la Única Cosa Que Es. Por tanto, lo que haces por otro, lo haces por ti; y lo que dejas de hacer por otro, lo dejas de hacer por ti.
La inversa también es cierta. Lo que haces por ti mismo, lo haces por otro; y lo que dejas de hacer por ti, dejas de hacerlo por otro. (Por eso se ha dicho tantas veces eso de que "si no sabes amarte a ti mismo, no sabrás amar otro".)
NEALE DONALD WALSCH
Es fundamental, Corazones, que no olvidemos esto nunca. Y en este orden, eh. Y es que... TÚ NO ERES EL PROTAGONISTA DE TU VIDA, por mucho que por ahí digan... ¡O sí, porque tod@s som@s Una Cosa!!!.
El protagonista de tu vida es "TODO EL MUNDO", o sea... ¡¡¡TÚ!!!!. Pero visto desde esta manera, siguiendo el orden correcto de las cosas. Pues Tod@s Somos Un@. Por tanto trata a los demás como quisieran ser tratados, como si fueses tú. Pues lo que haces a los demás se te hace a ti... por el sencillo motivo de que no hay "los demás". No hay nadie más que TÚ, pero en formas múltiples, distint@s y divers@s. No lo olvides. Así que...
¡¡¡TRÁTATE/ME BIEN!!!. Es hora ya de darse cuenta y actuar.
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Sí, amig@ lector/a, sí, es hora de darnos cuenta... Y aprender a multiplicar, pues somos bajo formas múltiples. Es la verdad callada en el Proceso de Creacción. Neale Donald Walsch nos la da en el capítulo 16 de su libro "Dios es felicidad". Aquí algunos extractos, de la "fórmula misteriosa" de cómo funciona la vida:
"Al enfocarte en ti mismo limitas la cantidad de energía a la que das salida, porque tú eres sólo uno. Pero al enfocarte en los demás, multiplicas la cantidad de energía a la que das salida por el número de otras personas en que te enfocas.
"Al enfocarte en ti mismo limitas la cantidad de energía a la que das salida, porque tú eres sólo uno. Pero al enfocarte en los demás, multiplicas la cantidad de energía a la que das salida por el número de otras personas en que te enfocas.
Esto no me lo había explicado nadie nunca. Ahora que lo veo, me parece perfectamente lógico. Si todo es energía (y lo es), y si la energía crea ( y así es), entonces, ¡cuánta más energía emplees más rápida y magnífica será tu creacción!.
Y todo lo que creas, lo vives. Esto se debe que, en última instancia, todas las cosas que salen de ti vuelven a ti. Y esto es porque "no hay nadie más en la sala". No hay nadie más que tú, bajo formas múltiples.
Y todo lo que creas, lo vives. Esto se debe que, en última instancia, todas las cosas que salen de ti vuelven a ti. Y esto es porque "no hay nadie más en la sala". No hay nadie más que tú, bajo formas múltiples.
El primer principio espiritual que se revela en "Conversaciones con Dios" es "TODOS SOMOS UNO".
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(...) Hasta que no entendí esto y hasta que no opté por amar a todos los demás de verdad, yo mismo tardaba en ser amado; pues, si una parte de Mí no era amada ¿cómo podía ser amado del todo?. Hasta que no entendí esto y hasta que no procuré firmemente recordar a todos los demás como Quienes Son De Verdad, yo mismo tardaba en recordar Quién Soy De Verdad; pues, si no se recordaba a una parte de Mí, ¿cómo podía ser recordado del todo?.
Para que cualquier parte de nosotros esté completa, debemos conocernos de manera completa.
Somos un holograma.
Por tanto, trata los demás como quisieras que te trataran a ti. (O aún, da un paso más allá: trátalo como sabes que a él/ella le gustaría, tal como quisieran ser tratados (*): Nota edición ) Pues lo que haces a los demás se te hace a ti... por el sencillo motivo de que no hay "los demás". No hay más que tú.
Eres un Aspecto Individualizado de la Divinida Misma. Y eso no se ha dicho muy alto ni con mucha frecuencia, pues es el colmo de la blasfemia.
Lo que se ha temido es que si esto se dice demasiado alto, con demasiada frecuencia, se perderá el modo en que algunas personas han aceptado la Creación Personal. Pues la verdad que más difícil de creer ha resultado para la humanidad es, precisamente, la verdad que habría liberado a la humanidad para siempre.
Se trata de la Verdad Callada:
"Dios y nosotros somos Uno".
Pronto más, amig@ lector/a. Esta entrada amplía, y completa a otras anteriores, tal como prometí. Te las dejo aquí referenciadas:
Con Amor,
y en Servicio.
Ann Love Bell
(Continuará...)
